Si se aprueba en su forma actual, el Fondo de Justicia, Derechos y Valores propuesto por la Comisión decepcionará a cualquiera que espere una nueva inyección de dinero para apoyar a las ONG que luchan a escala nacional por la democracia, el Estado de derecho y los derechos humanos.
La Comisión de la UE ha prometido un total de 947 millones de euros para el período 2020-2027: 642 millones para un programa de "Derechos y Valores" y 305 millones para un programa de "Justicia", lo que representa un descenso de más de 50 millones de euros frente a los tres programas de financiación existentes que sustituirá esta nueva propuesta. Si bien algunos de estos fondos llegarán a organizaciones de derechos humanos, también están destinados a una variedad de organizaciones, como programas nacionales de justicia, organismos públicos, think tanks, universidades e incluso empresas privadas. Como tal, el presupuesto está muy por debajo de los 2.000 millones de euros que habían pedido Liberties y el Parlamento Europeo que se destinaran a las ONG que trabajan para proteger los derechos, la democracia y el Estado de derecho.
Con la propuesta actual -que aún debe negociarse con el Parlamento Europeo y los Estados miembros en el Consejo- solo habrá financiación para proyectos que apoyen a llevar a cabo la aplicación de la legislación y las políticas de la UE, no para defender los derechos y la democracia de forma más amplia. Esto resulta especialmente preocupante si se tiene en cuenta el comunicado de prensa de la Comisaria de Justicia, Consumidores e Igualdad de Género, Věra Jourová:
"En un momento en el que las sociedades europeas se enfrentan al extremismo, al radicalismo y a las divisiones, es más importante que nunca promover, fortalecer y defender la justicia, los derechos y los valores de la UE. Las ONG y la sociedad civil desempeñan un papel crucial en la defensa de estos valores europeos".
Parece que la propuesta tampoco apoyará a las ONG que trabajan a nivel nacional, una petición clave de la reciente resolución del Parlamento Europeo y la propia propuesta de Liberties de un Instrumento Valores Europeo. Un cargo de la Comisión confirmó que el fondo propuesto, al igual que los programas de financiación que está sustituyendo, únicamente proporcionaría fondos para apoyar el funcionamiento diario de la red paneuropea o de las coordinadoras de ONG. Si bien esto es importante, es difícil ver cómo logrará tener un impacto real si no proporciona también subvenciones similares a organizaciones que trabajan a nivel nacional y que carecen de recursos. La práctica de la Comisión ha consistido en proporcionar únicamente financiación a corto plazo para proyectos específicos, lo que dificulta que las organizaciones que defienden los derechos humanos puedan planificar con antelación o atraer y retener personal cualificado, y tambien, que tienen que dedicar una parte considerable de su tiempo a tratar de lograr obtener fondos en lugar de poder realizar su trabajo.
De acuerdo con Michal Boni, el eurodiputado polaco que dirigió el trabajo de la reciente resolución del Parlamento Europeo para respalda la idea de un Instrumento de Valores Europeo, lo que resulta más preocupante es que "los recursos se acabarán gastando en todo un abanico de actividades, que incluirán también cuestiones como la promoción del patrimonio histórico y cultural europeo, la prevención y la lucha contra la violencia hacia los niños y las mujeres y muchos otros temas". Quedarán muy pocos recursos para las organizaciones de la sociedad civil que luchan por proteger y promover la democracia y el Estado de derecho".
Boni concluye advirtiendo que "será efectivamente mucho menos de lo que la UE ha estado gastando en la promoción de sus valores más allá de sus fronteras, lo que es difícil de justificar teniendo en cuenta los múltiples desafíos a la democracia dentro de la UE".
Quizá sea revelador el hecho de que el personal de la Comisión se negara a responder las preguntas de los periodistas sobre si estos fondos apoyarán a las ONG en países como Polonia y Hungría, donde los gobiernos están obstruyendo el trabajo de las organizaciones que promueven los derechos y las libertades.
El Director de incidencia política de Liberties, Israel Butler, señaló: "La Comisión ha comparecido ante el Parlamento Europeo y ha prometido más apoyo a las ONG que luchan por los derechos, la democracia y el Estado de derecho. La misma retórica que ha utilizado a la hora de lanzar esta propuesta. Sin embargo, la propuesta de la Comisión no aporta nada nuevo. La Comisión ha hecho caso omiso del Parlamento y, en la práctica, continúa con los mismos programas inadecuados de financiación, que viste con palabras nobles. Si la UE quiere evitar el continuo crecimiento del autoritarismo, necesita organizaciones de base fuertes que defiendan sus valores fundamentales. La falta de capacidad de reacción está costándole a los europeos sus derechos y democracias".