1) La Comisión de la UE debe aprovechar todas las oportunidades que se le presenten para reforzar las normas que protegen la democracia y obligar su cumplimiento, incluso con normas que pueda parecer que no estén relacionadas (en este caso, la protección de datos, el mercado interior y la Carta de Derechos Fundamentales). Lamentablemente, la Comisión suele rehuir esas oportunidades.
2) Las organizaciones de derechos humanos y pro democracia, sostén de la democracia participativa, están siendo objeto de muchos ataques y necesitan apoyo. La sentencia del Tribunal de Justicia de la UE ha expuesto el verdadero propósito de la ley húngara: estrangular el debate público y la crítica al gobierno a base de destruir la reputación y financiación de las organizaciones independientes.
3) La Comisión no puede dejarlo todo en manos del Tribunal de Justicia Europeo. Esta ley fue una de las muchas medidas diseñadas para anular la democracia. Las sentencias del TJUE son como unas podadoras: capaces de podar leyes mal diseñadas. Las podadoras no sirven contra la estrategia deliberada de Orban de dejar que la democracia se pudra.
La Unión Europea necesita herramientas y valentía para abordar el panorama más amplio: supervisión y seguimiento continuo por medio del Pacto de Democracia, Estado de Derecho y Derechos Fundamentales; Condicionalidad del Estado de Derecho y financiación adecuada para las ONG en el marco del programa Derechos y Valores, tal como propuso el Parlamento Europeo.
Consulta la nota de prensa del Tribunal de Justicia de la Unión Europea
Cobertura mediática
FAZ Ungarisches NGO-Gesetz verstößt gegen EU-Recht
Politico EU top court strikes down Hungarian NGO law
Dnevik Madžarska zakonodaja o nevladnih organizacijah krši pravo EU
Süddeutsche Zeitung Ungarisches NGO-Gesetz verstößt gegen EU-Recht