El gobierno checo ha aprobado la acogida de 153 refugiados cristianos de Irak y Líbano. Su reubicación la inició la Fundación Generace 21, que asume la mayor parte de los costes. Sus familias están actualmente en distintos campos de refugiados en Arbil, Irak y otros lugares. Los cristianos fueron expulsados de Mosul, Bajdida y pueblos aledaños el pasado agosto. En un principio, serán acogidos todos en una misma instalación donde se les enseñará checo. Transcurridos seis meses se les dividirá en cuatro o cinco grupos y se les reubicará en distintas ciudades.