A las 6 de una mañana de agosto de 2007, oficiales de inmigración llegaron a la casa de Meltem Avcil, golpearon la puerta y se llevaron a ella y a su madre al infame centro de detención británico, el Centro Expulsión de Inmigrantes del Bosque de Yarl. Tenía tan solo 13 años por aquel entonces.
Desde entonces Meltem ha permanecido activa en la campaña contra la detención de menores para fines migratorios. Este año comenzó una petición para poner fin a la detención de mujeres que buscan asilo.
Aquí comparte la historia de su familia en el acto organizado por la ONG Liberty, "Rubbing Along Together" en la Catedral de St Paul de Londres, en el que exploró el tóxico debate en torno a la inmigración en el Reino Unido.