A partir del 1 de enero de 2016, el 30% de los puestos de los consejos de dirección de cien grandes compañías alemanas deben ser ocupados por mujeres. El 27 de marzo, el Consejo Federal alemán aprobó una ley que introduce una cuota de género tanto en la dirección de las empresas alemanas como en los servicios públicos. La ministra de Asuntos Familiares, Mayores, Mujeres y Jóvenes, Manuela Schwesig, lo ha calificado de un "paso histórico". "La política está afrontando seriamente el trato igualitario entre mujeres y hombres. Es el mensaje más importante de esta ley", afirmó Schwesig.