Tres activistas de Antigone, una organización que forma parte de Liberties, y los presidentes de Arcigay y A Buon Diritto, organizaciones italianas dedicadas a la defensa de os derechos civiles fueron detenidos en Rusia y liberados tras varias horas en custodia policial.
Las autoridades consulares italianas en Rusia y el ministro de Asuntos Exteriores fueron avisados inmediatamente para que asistieran a los defensores de derechos humanos y mediaran con la policía.
Se les pidió que salieran del país
Los activistas pudieron comunicarse en todo momento y recibieron un trato respetuoso. La policía les entrevistó individualmente y les pidió que firmaran un informe sobre la detención.
Tras varias horas de detención fueron liberados, acusados de varias infracciones administrativas relacionadas con el objetivo de su estancia en Rusia, tras lo cual se les recomendó que regresaran a Italia rápidamente, para no prolongar una estancia inadecuada.
Las ONG rusas vigiladas muy de cerca
Los activistas fueron detenidos durante una reunión en la sede de la ONG rusa "Comité contra la Tortura" en Ninzhny Novogorod. La reunión la había organizado otra ONG, Man and Law, que trabaja en colaboración con Antigone en un proyecto de intercambio de prácticas y cooperación con la sociedad civil rusa.
El objetivo del proyecto es promover la defensa y el compromiso con los derechos civiles en Rusia, a través del empoderamiento de organizaciones locales, compartiendo las buenas prácticas de otros países.
Lamentablemente, las organizaciones rusas de la sociedad civil tienen grandes dificultades para hacerse oir y apenas son toleradas por el gobierno, que vigila muy de cerca sus actividades y las de las organizaciones con las que están asociadas.