Una juez militar territorial ha imputado a cinco militares (uno de ellos capitán) por un delito de tortura contra dos prisioneros, cometido en 2004 en la Base española en Irak. El proceso se inició tras la publicación por un periódico en 2013 de un video que muestra estas torturas. Cabe señalar que, a pesar de que la investigación de estas juzgado ordinario: la jurisdicción militar sólo debería tener competencia para resolver problemas disciplinarios, y no en casos de graves violaciones de derechos humanos.