Italia es uno de los pocos países de Europa donde no hay disposiciones de ningún tipo sobre el derecho de los reclusos a la afectividad. Si estás en la cárcel, has de renunciar a la idea de tener una vida privada y disfrutar de un poco de intimidad con tus seres queridos. Pero esto puede estar a punto de cambiar, la Comisión de Justicia del Parlamento italiano ha empezado a discutir una propuesta para regular el amor tras las rejas. "Estamos atrasados en esto, pero mejor tarde que nunca", dijo Alessio Scandurra, coordinador del Observatorio de prisiones de Antigone, en Vice IT.