El ex presidente rumano Ion Iliescu y otras 13 personas serán juzgadas por crímenes contra la humanidad relacionados con una manifestación en 1990 en Bucarest. Iliescu trajo a 10.000 mineros armadas con porras para reprimir una manifestación en la capital en junio de 1990. Cuatro personas perdieron la vida, 1.380 resultaron heridos y 1.250 fueron detenidos, según los datos oficiales. Las otras personas que se sentarán en el banquillo incluyen a un ex primer ministro y el jefe de inteligencia nacional del momento.