Despues de meses retenidos como presos en la isla de Lampedusa, un grupo de refugiados han iniciado una huelga de hambre para exigir que se les permita dejar la isla. Además de señalar las pésimas condiciones de vida en el antiguo centro de acogida de la isla y primer "hotspot" europeo, los refugiados han expesado su negación a que se les identifique, pues esto les obligaría a quedarse en Italia y quieren asentarse en otro país europeo. Hay aproximadamente 550 migrantes viviendo en estas condiciones. Una cifra que no deja de aumentar, pues recientemente ha habido múltiples nuevas llegadas.