A pesar de que la democracia española está a punto de cumplir su 40º aniversario, el cadáver del dictador sigue enterrado en el Valle de los Caídos, un monumento edificado durante la dictadura para honrar a los muertos durante la Guerra Civil. Hace unas semanas el nuevo Gobierno anunció sus planes de exhumar el cadáver de Franco, lo cual acaba de ser confirmado por el propio presidente Pedro Sánchez en una comparecencia ante el Parlamento, afirmando que "ninguna democracia puede permitirse monumentos que ensalcen una dictadura. Un país que mira al futuro no puede estar en deuda con el pasado".