El ministro neerlandés de Justicia y Seguridad Pública, Ferdinand Grapperhaus, quiere retirar la nacionalidad a dos hombres condenados por terrorismo. Es una medida especial que solo se ha llevado a cabo una vez antes. El caso actual se refiere a dos hermanos que todavía se encuentran en Países Bajos y que no han viajado a Siria como yihadistas. Los hermanos, que cuentan con varias nacionalidades, todavía pueden apelar la decisión. Si una persona solo tiene una nacionalidad, no puede perderla, nadie puede convertirse en apátrida.