La nueva ley sobre fertilización in vitro entró en vigor en Polonia a principios de noviembre. Es la primera vez que se introduce una normativa en este ámbito. Sin embargo, de acuerdo con el defensor de pueblo y la Helsinki Foundation for Human Rights, ésta viola la prohibición de la discrimación en el acceso a la asistencia médica, ya que la ley no permite que una mujer reciba el tratamiento a no ser que esté casada o tenga una relación estable con un hombre. El objetivo de esta medida es asegura que el recién nacido tenga ambos progenitores.