La campaña "Fui extranjero y me acogisteis" presentada para varias organizaciones que trabajan por que se respeten los derechos de los migrantes y refugiados que llegan a Italia, sigue recogiendo firmas para respaldar una nueva propuesta legal.
Dos objetivos
Existe una percepción general e injustificada de que los migrantes son peligrosos y que su sola presencia en Europa genera una situación de emergencia, y esta percepción alimenta políticas y leyes que fomentan la discriminación y la segregación.
La campaña "Yo fui extranjero" cuestiona esta percepción y exige que cambiemos nuestra mirada y reacción hacia los migrantes, pongamos la dignidad humana y los derechos humanos en el centro y avancemos hacia la integración y la inclusión.
Las organizaciones que están promoviendo la iniciativa decidieron unir sus conocimientos y experiencia para crear un proyecto de ley con dos objetivos principales:
- Mejorar los problemas legales de los migrantes, introduciendo un permiso de residencia temporal que facilite la búsqueda de empleo, un sistema que permita a los empleadores integren a los migrantes en la mano de obra y regularizarando a los extranjeros ya integrados en Italia.
- Garantizar los derechos fundamentales, mediante el acceso a las disposiciones de seguridad social, el fomento de los derechos a la salud y el acceso a la representación política.
Campaña de firmas
La campaña ha recogido firmas en toda Italia, especialmente alrededor del Día Mundial del Refugiado. Ahora mismo hay más de 100 puntos de información y mesas de recogida de firmas en todo el país que se pueden seguir a través del mapa de la página de Facebook de la iniciativa.
El objetivo es llegar a 50.000 firmas en seis meses, el número necesario para que la propuesta sea considerada por el Parlamento.
La iniciativa se está difundiendo tan rápidamente que incluso le ha llegado al Papa Francisco, que ha expresado su "sincero aprecio" por la misión y ha confirmado el apoyo de organizaciones católicas como Cáritas y la Fundación Migrantes, que trabajan activamente para mejorar la acogida de los migrantes.
La campaña continuará varios meses más, tratando de promover la inclusión y de plantear una alternativa a un sistema de acogida muy deficiente basado en una política de culpa en lugar de una de aceptación.