Google dejará de escanear los correos electrónicos, una práctica que le permite enviar publicidad personalizada y que ha provocado mucho revuelo por la falta de privacidad. Aunque esta práctica solo afecta a usuarios de la versión gratuita de Gmail, la falta de claridad sobre su alcance ha dificultado que se inscriban nuevos clientes al servicio de pago. Google ha anunciado que seguirá enviando publicidad en su servicio gratuito pues todavía tendrá acceso total al historial de búsqueda de los usuarios y a las visualizaciones de YouTube y podrá enviar mensajes personalizados en base a eso.