El Tribunal de Casación italiano ha rechazado el recurso de dos funcionarios que pegaron a un preso por haberse convertido al Islam. Estos fueron condenados inicialmente a 2 años y 8 meses y una multa de 5.000 euros por el abuso, que tuvo lugar en la cárcel de Asti en 2010, pero un tribunal de apelación redujo la sentencia luego a un año. El fallo del Tribunal de Casación, publicado a principios de este mes es definitivo.
Este caso también fue analizado por el Comité de Naciones Unidas contra la Tortura cuando redactó su informe sobre el país