Rumanía ha avanzado muy poco en 2017 en la lucha contra la corrupción en las instituciones públicas, según un nuevo informe del organismo contra la corrupción del Consejo de Europa, GRECO. Solo ha cumplido 2 de las 13 recomendaciones de GRECO en 2016, y persiste la preocupación por la falta de transparencia en el proceso legislativo, una de las recomendaciones clave que Rumanía ha incumplido. Transparency International clasifica al país como uno de los Estados más corruptos de la UE y su sistema de justicia se encuentra actualmente bajo seguimiento especial de Bruselas.