Según denuncia la prensa polaca, la policía espió a un político de la oposición y a dos activistas de una ONG durante las recientes manifestaciones contra el gobierno en contra de las reformas judiciales en el país. La organización Helsinki Foundation for Human Rights señala que este es un ejemplo más de la preocupante actividad policial de los últimos meses y una posible violación de los derechos y libertades de estas personas, como el derecho a la privacidad o la libertad de expresión en el contexto de la libertad de reunión.