La Cámara de Diputados italiana ha aprobado una nueva y alarmante enmienda sobre retención de datos que será evaluada ahora por el Senado. La iniciativa, propuesta intencionalmente en un momento de baja actividad política, permitiría a los proveedores de comunicaciones electrónicas guarden los datos de sus clientes durante 6 años. Aunque no podrán revelar el contenido de las comunicaciones, sí podrán registrar todo lo demás, una gran cantidad de información privada. Sin embargo el período de retención de 6 años no cumple la normativa de la UE, lo que puede suponer el rechazo de la enmienda.