Las saunas no pueden utilizar cámaras de seguridad en habitaciones en las que los clientes caminen en cueros, advierte la Autoridad Neerlandesa de Protección de Datos (AP), y ha enviado una carta a varias saunas tras las quejas. Según la AP, filmar individuos desnudos es una “grave vulneración de la intimidad”, aceptable solo en casos excepcionales. La prevención de actos sexuales o robos no basta. Visionar imágenes sin almacenamiento tampoco está permitido. Las personas no pueden ser espiadas en esas habitaciones, afirma la AP.