La Asociación Croata de Periodistas (CJA) ha enviado una carta abierta a un gran número de organizaciones e instituciones, pidiéndoles que apoyen a Hrvoje Zovko, ex editor ejecutivo de HTV4, uno de los canales de noticias de Radio-Televisión Croata (HRT) y actual presidente de la CJA. Esta carta denuncia la intimidación, censura y arbitrariedad con la que la administración de la HRT dirige la empresa, y exige que se cambien estas prácticas que suponen la degradación de un periodismo abierto y profesional..
La radiotelevisión se venga
Hrvoje Zovko fue despedido por denunciar la censura y decir que sentía que no podía realizar su trabajo de manera responsable y profesional. La CJA ha señalado que la dirección de la HRT, en lugar de estudiar la denuncia de Zovko, se ha vengado de la CJA, cuya sección en la HRT ha sacado a a la luz las irregularidades y violaciones de las normas periodísticas profesionales en numerosas ocasiones.
Cuando presentó su dimisión, Zovko se enfrentó verbalmente con su jefa, Katarina Periš Čakarun, directora del Servicio de Información de Medios de HRT. El servicio público de televisión utilizó este conflicto para despedirlo, obviando completamente su derecho a expresar su opinión. Esta es una práctica inherente a los regímenes autoritarios y las sociedades democráticas no deberían tolerarla.
El comité parlamentario se niega a analizar la cuestión
El presidente de CJA luchó en la redacción por los principios de los estándares periodísticos profesionales, pero fue "recompensado" con sanciones por negligencia verbal. Zovko ha trabajado en la televisión pública durante 21 años y nunca recibió ninguna advertencia verbales o escrita sobre su trabajo. Se enteró de su despido a través los medios de comunicación, y su dirección de correo electrónico oficial fue cancelada antes de que fuera despedido oficialmente.
Inmediatamente después de recibir la noticia del despido de su presidente, CJA envió una solicitud oficial al Comité de Información, Informatización y Medios de Comunicación del Parlamento para incluir el caso en el orden del día de la sesión y permitir la participación de los representantes del Comité Ejecutivo de CJA, para que explicaran la situación. La mayoría de los miembros del Comité rechazó discutir la intimidación de periodistas en la HRT y la destrucción sistemática del servicio público de medios de comunicación. La comisión respondió que se trata de un "conflicto laboral" en el que "no quieren interferir". Lamentablemente, debido a la voluntad del partido gobernante y de la oposición, la CJA no está representado en el Comité, lo que significa que las voces de los periodistas no pueden ser escuchadas a través de este órgano.
Tras el despido de la junta de HRT, otros sucesos parecidos han sido silenciados
Otra pieza del puzzle es que las conclusiones de un informe de 2016 de la junta directiva de la HRT -que fue despedida- advertían de numerosas irregularidades en el trabajo y la gestión de la dirección fueron declaradas "secreto empresarial" a petición de la misma administración. La mayoría del Parlamento se niega a desclasificar el documento, a pesar de que la HRT está financiada por los contribuyentes, y estos tienen derecho a saber si las decisiones empresariales de la dirección son legales.