Un total de 312 defensores de derechos humanos fueron asesinados en 27 países el año pasado según un nuevo informe de Front Line Defenders. El 80% de los asesinatos ocurrieron en cuatro países: Brasil, Colombia, México y Filipinas, y dos tercios de los objetivos fueron activistas que trabajan en defensa del territorio, el medioambiente y los derechos de los pueblos indígenas. El informe constata asimismo que las defensoras de derechos humanos cada vez denuncian más "campañas de difamación y desprestigio hipersexualizadas" que tratan de limitar su activismo.