Ocho imanes han visto rechazada su solicitud de entrada a los Países Bajos en el año 2015 con el fin de evitar que den sermones activistas. Otros quince, tras una consulta previa, no fueron invitados. Algunos alcaldes pidieron una lista negra de los "predicadores polémicos". Estos planes probablemente se veran bloqueados por las normas europeas. "Siempre que un individuo no haya sido condenado por un delito, legalmente no es aceptable ni proporcional meterle en una "lista de sospechosos" y compartirla con, por ejemplo, el gobierno local", declaró el Ministerio de Seguridad y Justicia.