Los expertos en derechos humanos de la ONU han pedido a todos los países que deroguen las leyes y políticas restrictivas sobre el aborto, pues salvaría la vida de casi 50.000 mujeres al año. En la actualidad, estas leyes se aplican al 40% de la población mundial y en los países donde el aborto está prohibido, las mujeres pueden ser juzgadas y encarceladas. "La criminalización del aborto y la falta de un acceso adecuado a un servicio para terminar un embarazo no deseado son formas de discriminación basadas en el sexo", han señalado los expertos en una declaración conjunta