La tarde del martes fue un éxito importante para Liberties y para los defensores de derechos humanos en toda la UE. La Comisión de Libertades Civiles del Parlamento Europeo respaldó la idea de un nuevo fondo de la UE para financiar organizaciones que trabajen a favor de la democracia y los derechos en toda la Unión. La resolución del Comité pidió (con una mayoría de 25 a 5) a la Comisión Europea que establezca un "Instrumento de Valores Europeos".
Liberties propuso por primera vez la creación de este fondo en 2015 y desde entonces la idea ha cosechado cada vez más apoyo de las organizaciones que protegen los derechos humanos, la Agencia de Derechos Fundamentales de la UE, la Comisaria de Justicia de la UE, Vera Jourova, y cada vez más personas en el Parlamento Europeo.
Lee la propuesta de Liberties para un instrumento de valores europeos
La UE inyecta cientos de millones de euros para apoyar a organizaciones que trabajan para defender los derechos y la democracia fuera de sus fronteras. Tiene varios programas para ayudar a estas organizaciones a que promuevan los valores fundamentales de la UE fuera de Europa, con el Instrumento Europeo para la Democracia y los Derechos Humanos, como principal financiador, otorgando 1.300 millones de euros para un periodo de siete años. Sin embargo, la UE apenas invierte en promover y proteger los derechos y la democracia dentro de sus Estados miembros. En su lugar, los europeos dependen de gobiernos como los de Noruega, Islandia y Liechtenstein y de fundaciones filantrópicas para fomentar los derechos y la democracia aquí en casa. Ya es hora de que la UE se suba al carro e invierta en los valores que compartidos de la UE y de los europeos.
Las organizaciones pro derechos y democracia en toda Europa sufren recortes de financiación, campañas de desprestigio y muerte por asfixia burocrática. Esto es especialmente grave en Hungría y Polonia, donde se ha cortado el financiamiento público a los activistas. El gobierno húngaro además ha implementado medidas que evitan de facto o limitan las posibilidades de financiación que estas organizaciones por donantes internacionales. En Irlanda han creado también un problema similar para los activistas. En Hungría y Polonia, así como en Bulgaria, Italia y Rumania, los políticos y los medios de comunicación afines al gobierno han llevado a cabo campañas de difamación contra los defensores de derechos humanos. Si la sociedad pierde la confianza en ellos, dejarán de realizar donaciones o prestar atención a lo que dicen. Estas medidas están diseñadas para silenciar las críticas al gobierno, que son fundamentales para que exista un debate democrático equilibrado.
Si se pusiera en marcha el Instrumento de Valores Europeos, podría desempeñar un papel vital para revertir el terrible ascenso del autoritarismo en toda la UE. Los resultados de las elecciones en Hungría el pasado fin de semana muestran claramente que los gobiernos autoritarios pueden manipular suficientemente un sistema democrático para lograr mantenerse en el poder. Es difícil imaginar que Fidesz perdiera las elecciones teniendo en cuenta las circunstancias: apenas hay espacio para un debate equilibrado o para la crítica del gobierno, los medios de comunicación públicos se han convertido en una máquina de propaganda gubernamental y los privados en gran medida son respetuosos con el gobierno. Hablar tiene un precio: el gobierno logró el cierre del principal diario de tendencia izquierdista en 2016 después de que publicara una noticia sobre la corrupción gubernamental, y se ha dedicado a acosar a activistas que trabajan por los derechos humanos, la democracia y el Estado de derecho desde 2013. Además, tanto estas elecciones como las de 2014 han sido consideradas sesgadas por los observadores internacionales debido a que el diseño de la distribución de votos está hecho para que beneficie al partido gobernante y porque el Fidesz utilizó recursos estatales (en lugar de solo los del partido) para su campaña electoral. Si unimos esto a la ausencia de una oposición política que haga contrapeso, y los millones que ha invertido el Fidesz en campañas de odio para crear dragones terribles que supuestamente solo el primer ministro Orban puede vencer. ¿Cómo podría haber ganado otro partido?
Lee la propuesta de Liberties para un instrumento de valores europeos
Un nuevo fondo que apoyara a los defensores de los derechos humanos y de la democracia en toda la UE, si es lo suficientemente grande y financia las actividades adecuadas, podría ayudar a garantizar que estos grupos cuenten con los recursos suficientes para mantener vivo el debate democrático. Es especialmente importante, como reconoce la resolución del Comité, que las organizaciones de derechos humanos obtengan apoyo para comunicarse con la sociedad. No solo para contribuir a que la población entienda y participe activamente en los asuntos actuales, sino también para explicar a la gente por qué es tan importante defender tribunales independientes, medios libres e independientes, elecciones justas y las libertades civiles. Las organizaciones que luchan por nuestros derechos son fundamentales para la supervivencia de las democracias que funcionan bien, pues obligan a los gobiernos a rendir cuentas y permiten que la sociedad participe en la formulación de leyes y políticas. Precisamente por eso mismo, la UE invierte mucho dinero apoyándolas en otros países.
La lucha para lograr el Instrumento de Valores Europeos aún no ha terminado. La resolución aprobada por el Comité ahora se someterá al voto de todos los eurodiputados en una sesión plenaria del Parlamento Europeo. Si se logra, creará presión sobre la Comisión Europea para que incluya una propuesta para crear el Instrumento de Valores Europeos en su nuevo plan de gastos de siete años, que se anunciará en mayo. Y lfinalmente, el último paso será lograr que los gobiernos nacionales en el Consejo de la UE estén de acuerdo.