Una comisión especial de 20 agentes está investigando la muerte de Lübcke, y ya se ha descartado el suicidio.
Como presidente del Consejo Regional de la ciudad de Kassel, este político de 65 años era una importante figura pública en Hesse.
Cuando las llegadas de refugiados estaban en pleno auge, Lübcke defendió una mayor solidaridad con los recién llegados y condenó el extremismo de derecha y la xenofobia.
Amenazas de muerte de la extrema derecha
En una reunión municipal en 2015, Lübcke fue confrontado por miembros del movimiento nacionalista y anti-islamista Pegida (acrónimo de Patriotas Europeos Contra la Islamización de Occidente).
En el debate, el político destacó la importancia de los valores cristianos y declaró que quienes "no apoyen estos valores pueden salir de este país en cualquier momento". Desde entonces, se convirtió en un objetivo de la extrema derecha, recibió amenazas de muerte y su dirección fue publicada en el blog racista PI-News, tras lo cual se le designó protección personal.
Reacciones de odio en las redes sociales
El anuncio de la muerte de Lübcke ha provocado una avalancha de reacciones de odio en las redes sociales desde cuentas identificadas como cercanas a la extrema derecha.
El presidente de Alemania, Frank-Walter Steinmeier, ha condenado estas reacciones y ha dicho que esperaba "un poco más de indignación de la ha podido ver en este momento". También hizo un llamamiento a las plataformas en las que se propaga el discurso de odio para que muestren más responsabilidad.
El motivo del asesinato aún no está claro
Todavía no se sabe si el asesinato de Lübcke tuvo o no un trasfondo político. Los investigadores no han detectado ninguna conexión directa entre las amenazas de muerte de 2015 y su asesinato.
Para otras víctimas de amenazas de
muerte, sin embargo, su asesinato es una advertencia. "Hasta
ahora no me había preocupado recibir amenazas de muerte", tuiteó Annalena Schmidt. Ahora la bloquera que, como Lübcke,
ha estado defendiendo los derechos de los refugiados, está
preocupada.