La Oficina Central de Contra la Corrupción (OCCC) de Polonia ha rechazado una petición de la Fundación de Helsinki para los Derechos Humanos a divulgar información sobre si el OCCC utiliza un software llamado Sistema de Control Remoto (RCS), que es capaz de monitorear ordenadores y teléfonos y recuperar datos de dichos dispositivos.
La Oficina Central Contra la Corrupción justificó su decisión indicando que se clasifica la información solicitada. Según la ley de Protección de Información Clasificada, la información es secreta si su divulgación obstaculiza el desempeño de las tareas de un servicio, incluyendo la ejecución de las actividades operacionales. La OCCC también señaló que la información solicitada constituye "otro secreto protegido por la ley" bajo la ley de la Oficina Central Contra la Corrupción. Argumentó que cualquier información sobre sus capacidades técnicas, tales como el monitoreo de ordenadores y teléfonos y el seguimiento de la correspondencia en Internet, es información privilegiada recolectada en el ámbito de las actividades conforme a la ley bajo la cual funciona la Oficina.
La Fundación de Helsinki para los Derechos Humanos le preguntó a la Agencia de Seguridad Interna (ABW) la misma pregunta acerca del uso de RCS. En marzo, la ABW anunció que no utiliza este software. La Fundación de Helsinki ha traído ahora una demanda ante un Tribunal Administrativo Provincial, solicitándole que revise la legalidad de la decisión de la OCCC contra la divulgación de la información.
El software del Sistema de Control Remoto es capaz de monitorear los teléfonos y computadoras y puede recuperar datos almacenados en dichos dispositivos, incluso si el usuario no está conectado. El sistema también puede utilizarse para realizar un seguimiento a correos electrónicos. También puede copiar archivos desde el disco duro de un ordenador, grabar llamadas de Skype, interceptar contraseñas usadas en un navegador y activar remotamente el micrófono de un ordenador o una cámara web.
En febrero, los científicos afiliados al Citizen Lab, un grupo interdisciplinario con sede en la Universidad de Toronto (Canadá), publicó Mapping Hacking Team's "Untraceable" Spyware, un informe que analizó el uso del sistema. El informe dice que el sistema se ofrece en venta a gobiernos por Hacking Team, una empresa con sede en Milán. El documento nombra 21 gobiernos, Azerbaiyán, Colombia, Egipto, Etiopía, Hungría, Turquía, Marruecos y Polonia entre ellos.