República Checa ha anunciado que dejará de recibir a los migrantes que llegan bajo el plan de la UE de traslado de los solicitantes de asilo de la Unión que llegan a Grecia e Italia. El gobierno dijo el lunes que tomó la decisión por motivos de seguridad. Según el plan acordado en 2015, cada Estado miembro debe admitir una cierta cuota de los 160.000 migrantes que están varados en Grecia e Italia, pero varios países, entre ellos Hungría y la República Checa, se han opuesto al plan y no han aceptado las cuotas.