En la próxima cumbre de la UE, los líderes no debatirán el nuevo plan de cuotas migratorias diseñado por la presidencia de Estonia, a pesar de que es, en estos momentos, una de las cuestiones más candentes en Europa, según informa la prensa de Bruselas. En un momento en que la cuestión de la migración divide a Europa oriental y occidental tan profundamente, este es un gran golpe para los líderes europeos.
Un plan necesario, retrasado
El nuevo plan otorgaría un papel más importante a la prevención, pues permitiría mitigar las grandes llegadas repentinas de refugiados y solicitantes de asilo. Los estonios le darían a la Comisión Europea el papel principal de decidir cuántos solicitantes de asilo debe acoger cada Estado y el sistema de distribución se calcularía en base a la riqueza y población de los países.
Asimismo, en caso de que se produjera un flujo de entrada importante, se activaría un sistema de alerta temprana que requeriría que los Estados miembros brinden otras formas de ayuda además de acoger a los solicitantes de asilo. La propuesta señala que la reubicación de los solicitantes de asilo entre los países solo tendrá lugar si las partes involucradas aceptan de forma voluntaria.La política estancada
En la agenda de la cumbre de la UE de diciembre, figura que habrá algunas discusiones sobre migración, pero, de acuerdo con fuentes diplomáticas que hablaron con EUobserver, no entrarán a debatir los detalles de la propuesta de Estonia. El país báltico, que actualmente ocupa la presidencia rotatoria de la UE, está tratando romper el estancamiento político en el que se encuentra esta cuestión, para abordar también algún tipo de solución a la reforma en curso del "Reglamento de Dublín".
La misión es un intento de reconciliar los problemas que enfrentan países como Italia y Grecia, que reciben la gran mayoría de las llegadas de migrantes del otro lado del Mediterráneo, y los Estados del este que se oponen ferozmente a las cuotas obligatorias de acogida de migrantes.
Hasta ahora, la UE no ha logrado un acuerdo entre los gobiernos que se quejan de cargas injustas. Bajo la normativa acual de asilo, las solicitudes deben gestionarse en el país en el que ingresan por primera vez las personas a la UE.
A principios de noviembre, el Parlamento Europeo presentó su propio posicionamiento y propuso la reubicación obligatoria de los solicitantes de asilo. Sin embargo, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo en octubre que las cuotas obligatorias de acogida de migrantes no tienen futuro. En la última cumbre de octubre, los líderes se dieron hasta junio de 2018 para tomar una decisión final. Estamos deseando ver soluciones viables y bien pensadas.