Un Youtuber ataca a los principales partidos políticos en Alemania
"La política europea es un puto aburrimiento", pero "id a votar el próximo fin de semana, si no, serán las personas mayores las que decidan vuestro futuro".
Un Youtuber llamado Rezo es la pesadilla de los partidos del establishment en Alemania. En su vídeo "Die Zerstörung der CDU" [La destrucción del CDU], el joven de 26 años critica duramente las políticas fundamentales del conservador Partido Demócrata Cristiano (CDU) de la canciller Angela Merkel. Según él, a lo largo de los muchos años que ha estado (co)gobernando Alemania, el CDU ha fracasado en prácticamente todos los campos. La brecha entre ricos y pobres se ha ampliado, la política climática del país es desastrosa y se ha invertido muy poco dinero en educación e igualdad de oportunidades. Sus declaraciones están basadas en fuentes que muestra en el clip. El video se hizo viral justo antes de las elecciones europeas y fue ampliamente compartido entre sus fans, los progenitores de estos y finalmente entre los usuarios de las reddes sociales en general. Recibió 14 millones de clics en dos semanas. Poco antes de las elecciones, prácticamente todos los medios de comunicación alemanes hablaban de Rezo.
Al principio de su vídeo, Rezo promete que "este no va a ser otro vídeo aburrido sobre política". Dice que los hechos y las cifras por sí solos llevan a la conclusión de que el CDU está destruyéndose a sí mismo, su reputación y sus resultados electorales.
Rezo convence a sus espectadores por su elocuencia, su encanto y por su autenticidad y claridad a la hora de dar su opinión, además de por su estilo informal de YouTube. Sin embargo, algunos políticos afirman que se pasa de encanto y que tiene demasiada influencia y está agitando a la gente en el país.
La líder del CDU
pide que se regule la formación de opinión en Internet
Rezo ha utilizado su popularidad para expresar su opinión. En una entrevista para bento.de declaró que nadie le había pagado y que solo quería generar más debate en torno a estos temas. Su declaración al final del video de 55 minutos: "¡Por favor no votéis al SPD, ni al CDU, tampoco al CSU y sobre todo no a AFD!" Varios comentaristas consideran que se trata de un claro intento de manipular la opinión popular y de un llamamiento directo a votar por los demás partidos. Los Verdes lograron aumentar sus votos en las elecciones europeas y se les considera los ganadores de la votación.
El CDU perdió el 6,4% de sus votos, en comparación con los resultados de 2014, y su reacción no se hizo esperar. La líder del partido, Annegret Kramp-Karrenbauer, llegó a declarar que durante la campaña electoral los intentos de formar la opinión pública ( "Meinungsmache") deberían estar regulados:
"La pregunta se plantea en relación al tema de la formación de opiniones: ¿Cuáles son de facto las normas del sector analógico y qué normas se aplican realmente al sector digital?"
Los internautas reaccionan con furia
A las pocas horas, la red se llenó de mensajes indignados ante su declaración. Y algunos de los Youtubers más famosos de Alemania iniciaron una petición exigiendo "No a la censura de nuestra libertad de expresión, Sra. Kramp-Karrenbauer".
No es nada nuevo para los actores, artistas y músicos expresar, por ejemplo, que expresan sus opiniones políticas y se comprometen públicamente con distintas causas políticas. Los Youtubers que utilizan sus plataformas para expresar sus opiniones tienen derecho a posicionarse política e inequívocamente, siempre y cuando no hagan nada ilegal. No importa cuán inconvenientes sean las opiniones que difundan. Volker Kitz, autor del libro "Meinungsfreiheit! Demokratie für Fortgeschrittene" (¡Libertad de expresión! Democracia para estudiantes avanzados) señala: "La libertad de expresión en Alemania va muy lejos, tanto en el mundo analógico como en el digital. Toda valoración personal está protegida como si fuera una opinión, aunque a otros les parezca absurda. El derecho penal marca la línea, por ejemplo, con los delitos de insultos e incitación al odio. Los periodistas sí están sujetos a los requisitos de diligencia debida, pero las estrellas de YouTube no son periodistas. Son más bien personaidades públicas a las que se les permite expresarse ampliamente sobre temas de actualidad en el mundo analógico".
Los ciudadanos independientes tienen que saber distinguir por sí solos con qué opiniones están de acuerdo y a quiénes eligen como modelos a seguir.