El bufete jurídico Prakken d'Oliveira, junto con la Asociación Neerlandesa de Abogados Defensores ha iniciado un procedimiento de medidas cautelares contra el Estado neerlandés por las escuchas a abogados que lleva realizando desde hace años el servicio de inteligencia. El año pasado, Ronald Plasterk, ministro de Interior, declaró que una de las denuncias de Prakken d'Oliveira era parcialmente admisible pero se negó a tomar medidas para proteger el derecho de los abogados al privilegio jurídico. Los abogados estiman que las escuchas violan la Convención Europea de DD HH y la ley de la UE.