En solidaridad con el pueblo de Ucrania, cuya seguridad está amenazada, y con los manifestantes en Rusia y en todo el mundo, que han alzado su voz contra los regímenes que gobiernan y crean guerras y violencia, cientos de personas dejaron mensajes en la Plaza Zrinjevac de Zagreb, el sábado pasado.
La acción "¡Basta de guerras, queremos paz!" ha sido promovida por el Centro de Estudios para la Paz para compartir en espacios públicos palabras de ánimo, esperanza y resistencia contra la guerra. Las guerras traen consigo consecuencias sociales y económicas a largo plazo: destruyen vidas, empobrecen territorios y personas, y provocan crisis en todo el mundo, por lo que es importante hacer todo lo posible para evitarlas.
Foto: Dag Oršić
"Nos solidarizamos con el pueblo de Ucrania y condenamos rotundamente el uso de la fuerza, la agresión, todos los daños, todas las víctimas directas y las divisiones a largo plazo y las consecuencias que dejarán en la sociedad durante mucho tiempo. La paz, la seguridad humana y la vida humana deben estar por encima de todas las políticas, y debemos aspirar a preservarlas. La seguridad humana incluye la protección de la vida, los derechos humanos y las libertades y la posibilidad de un desarrollo socioeconómico estable. La escalada de la violencia y la guerra en Ucrania amenaza todo eso", advirtió Sandra Kasunić, del Centro de Estudios para la Paz.
Croacia debe hacer todos lo posible para evitar una mayor
escalada de la violencia a través de la diplomacia y el diálogo, guiada por el
principio de la protección de la vida humana y las soluciones pacíficas del conflicto en Ucrania.
"Al principio de su mandato, el propio Gobierno de la
República de Croacia anunció que Croacia, recordando su propia experiencia,
sería un país que ayudaría a trabajar para detener la violencia y encontrar
soluciones pacíficas. No debemos renunciar a ello", señala Iva Zenzerović,
del Centro de Estudios para la Paz.
Muchas personas ya han tenido que abandonar sus hogares, por lo que la Unión Europea, incluida Croacia, tiene que proporcionar caminos y refugios seguros y lícitos a todos los que buscan seguridad.
El Centro de Estudios para la Paz y todos los que acudieron a apoyar la acción solidaria compartieron un mensaje claro: "¡Basta de guerras, queremos paz!".