Los Defensores de los Derechos Civiles condenan el ataque reciente contra varios defensores de derechos humanos de la Iniciativa de Jóvenes por los Derechos Humanos (YIHR) de Serbia, una asociación que colabora desde hace tiempo con los Defensores de los Derechos Civiles, y reclama una intervención legal inmediata para llevar a los responsables ante la justicia.

Una pelea brutal

El incidente se produjo la noche del 17 de enero, cuando nueve activistas de YIHR recibieron el brutal ataque de miembros de una sección local del Partido Progresista Serbio (SPP), el partido actualmente en el gobierno, dirigido por el Presidente Alexandar Vucic. Como parte de una campaña electoral agresiva en la ciudad de Beska, el SPP había organizado un debate en el que estaba prevista la intervención de Veselin Slijivancanin, condenado por crímenes de guerra.

Cuando Slijivancanin llegó al podio, los activistas de la YIHR le interrumpieron, con pancartas en las que podía leerse: "los criminales de guerra deberían callarse para que [el público] pueda hablar de las víctimas". Se desencadenó una pelea y tanto los activistas, como varios periodistas que estaban presentes fueron expulsados de la sala.

De acuerdo con Anita Mitić, de la YIHR, que presenció lo sucedido, varios hombres les siguieron al exterior y empezaron a atacarles físicamente. A resultas de ello, dos defensores de derechos humanos fueron llevados al hospital con contusiones graves y posibilidad de fracturas óseas. El coche de Anita Mitić también quedó destrozado después de la pelea.

Jóvenes defensores

La Iniciativa de Jóvenes por los Derechos Humanos (YIHR) es una red regional de organizaciones no gubernametnales con programas de intervención en Serbia, Kosovo, Croacia, Montenegro y Bosnia-Herzegovina. Jóvenes de los países mencionados crearon la Iniciativa para aumentar la participación juvenil en la democratización de la sociedad y en el fortalecimiento de la ley; y ello enfrentándose a los traumas del pasado reciente de la región, a la par que estableciendo nuevos vínculos progresistas en la región de la antigua Yugoslavia marcada por el conflicto.

“Estos ataques, de carácter brutal, suponen una ruptura directa de los compromisos de Serbia con la defensa de la libertad de expresión y representan un paso más en el deterioro del panorama actual de derechos humanos en el país. La presión a la que se ve sometida la libertad de expresión en Serbia es cada vez mayor, dada la presión, la censura y las interferencias por parte de las autoridades que sienten los medios de comunicación y la sociedad civil. Las autoridades deben investigar este indicente sin demora y asegurar que los responsables son llevados a los tribunales", dijo Goran Miletic, director de programas para los Balcanes occidentales de los Defensores de los Derechos Civiles.

Veselin Sljivancanin estuvo a cargo de la seguridad del Ejército Popular Yugoslavo. Fue acusado del exterminio, asesinato, tortura y trabajo inhumano de ciudadanos croatas y no serbios tras la caída de Vukovar en noviembre de 1991. El Tribunal Penal Internacional para la ex Yugoslavia (ICTY) le condenó en 2010 a diez años de cárcel por instigar y secundar las torturas de prisioneros durante el periodo.