De acuerdo con el gobierno eslovaco, el número excesivo de niños Roma en "educación especial" se debe a un índice mayor de endogamia en sus familias, que produce trastornos en el desarrollo. Ha sido la respuesta a las medidas de la CE contra Eslovaquia por infringir la legislación anti-discriminación de la UE, contra los niños Roma en las escuelas. "La explicación del gobierno es racista y discriminatoria: retrata a los Roma como un grupo con un estilo de vida 'socio-patológico' característico", replican conjuntamente varias ONGs. Sin embargo, el gobierno eslovaco no se ha retractado.