Madina Hussiny, de seis años, fue atropellada por un tren en noviembre de 2017. Las autoridades croatas rechazaron la solicitud de asilo de su familia y les ordenaron que caminaran por las vías del tren hasta llegar a Serbia.
Este mes, la hermana de Madina se puso en contacto con la organización miembro de Liberties, el Centro de Estudios para la Paz, para avisarles que la familia había regresado a Croacia y había sido detenida en un centro en la localidad de Tovarnik.
Están encerrados en tres salas distintas y solo les permiten verse durante las comidas.
Sin derechos
El personal del centro de detención no les proporciona ningún tipo de información, ni sobre su caso, ni sobre el tiempo que estarán detenidos.
La familia solicitó ponerse en contacto con el abogado que les representa en el proceso penal contra el Ministerio del Interior croata en el caso de la muerte de Madina, pero se les denegó alegando que ya habían firmado un contrato con su abogado en Serbia.
Además, obligaron a la familia a firmar documentos que no entendían. La hermana de Madina explicó que las autoridades croatas les amenazaron con enviarles a Serbia si no las firmaban, a pesar de que habían solicitado asilo en Croacia.
Ni siquiera tuvieron la posibilidad de establecer un contacto oficial con el Centro de Estudios para la Paz, ni tampoco al Centro de Estudios para la Paz se le permitió visitarles ni proporcionarles la asistencia jurídica legalmente garantizada.
Denuncia en Estrasburgo
El Centro de Estudios para la Paz recuerda que Croacia debe garantizar los derechos de la familia, permitiéndoles libre circulación y asistencia legal. La organización señala que ha habido demasiados intentos de manipular e intimidar a esta familia, que ya ha sufrido mucho.
El abogado de la familia ha presentado una denuncia constitucional y solicitado al Tribunal Europeo de Derechos Humanos que imponga una medida temporal para liberarles.
El tribunal emitió una medida provisional urgente para que se busque una solución humanitaria para la familia, pero al sexto día después del dictamen, ni el abogado, ni el Centro de Estudios para la Paz tuvieron acceso a la familia ni a la información sobre su caso, ni a isaber dónde se encuentran.