El grupo de hackers Tsar Team robó recientemente los datos personales de cientos de pacientes de una clínica de cirugía plástica en Lituania: nombres, apellidos, códigos de identidad, fotos preoperatorias e íntimas. Al no recibir ningún rescate, los hackers publicaron la información, obligando a las autoridades a iniciar una investigación preliminar sobre este caso sin precedentes. Una investigación paralela sobre la clínica reveló que no había tomado todas las precauciones necesarias para proteger los datos de sus pacientes.