¿Qué significa "homofobia" y qué implica?
La palabra "homofobia" se compone de las palabras griegas "homos", que significa "igual", y "phobos", que significa "miedo" y denota actitudes negativas, prejuicios y rechazo hacia las personas homosexuales.
El término fue utilizado por primera vez a finales de la década de 1960 y principios de la de 1970 por el psicólogo estadounidense George Weinberg. En su entonces revolucionario libro Society and the Healthy Homosexual [La Sociedad y el Homosexual Sano], Weinberg definió la homofobia como un trastorno cerebral que padece la persona homófoba. Debido a esta definición como trastorno de ansiedad, una parte de la comunidad LGTBI (Lesbiana, Gay, Trans, Bisexual e Intersexual) critica la palabra "homofobia". Sostienen que el término es confuso, ya que las personas homófobas no tienen miedo de las personas homosexuales, sino que sienten aversión y hostilidad.
La ciencia distingue tres dimensiones diferentes de la homofobia. En primer lugar, la homofobia afectiva, que se da cuando, por ejemplo, una persona siente una sensación de desagrado al ver a dos personas del mismo sexo besándose en público. En segundo lugar, la homofobia cognitiva, que alude a las actitudes que, por ejemplo, pretenden denegar ciertos derechos a las personas homosexuales. Por último, la homofobia conductual, que se expresa mediante comentarios ofensivos y violencia física.
Para las personas homosexuales, la homofobia puede suponer una restricción real de sus libertades, y no solo porque en algunos países se les nieguen derechos. Incluso en estados liberales, puede que no se atrevan a mostrar afecto hacia su pareja en público o que eviten por completo ciertos lugares, por miedo a la violencia.
¿Cuáles son las causas de la homofobia?
Como ocurre con todas las formas de discriminación u hostilidad hacia cualquier grupo de personas, puede haber múltiples razones para la homofobia.
Los seres humanos tendemos a categorizar y encasillar las cosas para que nuestro mundo sea más sencillo y fácil de entender. Muy a menudo, esto sucede mediante un proceso automático en el cerebro. De este modo, un grupo de personas puede ser encasillado bajo la misma etiqueta y recibir ciertas características. Evidentemente, estos prejuicios también pueden ser negativos, por ejemplo, debido a que la gente tiende a rechazar lo que es extraño y desconocido. Si una persona no tiene contacto con personas homosexuales o queer en su vida diaria, pueden surgir prejuicios homófobos. Queer es un término colectivo para todas aquellas personas que no son heterosexuales o que no se identifican con el género que se les asignó al nacer.
El entorno y la educación también desempeñan un papel importante. Por ejemplo, si se vive en un entorno en el que se utilizan palabras como "gay" y "maricón" como insultos, la percepción del grupo es más negativa.
Otra razón puede ser la actitud hacia los roles tradicionales de género y lo que se supone que es un "verdadero hombre" y una "verdadera mujer". Las relaciones homosexuales cuestionan completamente estos conceptos, y eliminan este tipo de división. Las personas homófobas a veces sienten que esto plantea una amenaza a su forma de vida.
Por último, la religión también puede ser una de las causas de las actitudes homófobas. En todas las escrituras sagradas de las religiones monoteístas se pueden revelar pasajes que pueden interpretarse como un rechazo a la sexualidad, especialmente a la masculina. Naturalmente, esto no convierte automáticamente a todas las personas religiosas en homófobas, solo aquellas que se inclina hacia una lectura fundamentalista.
¿Cuándo es el Día Internacional contra la Homofobia?
El Día Internacional contra la Homofobia, la Transfobia y la Bifobia se celebra cada año el 17 de mayo.
Esta fecha es significativa para la comunidad LGTBI, pues el 17 de mayo de 1990 se suprimió la homosexualidad del código de diagnóstico CIE-10 de la Organización Mundial de la Salud. Desde entonces, la homosexualidad ya no se considera oficialmente una enfermedad.
El día sensibiliza sobre los problemas que afectan a las personas LGTBI en todo el mundo. Más de dos mil millones de personas siguen viviendo en países donde las relaciones entre personas del mismo sexo constituyen un delito, y en once países existe incluso la amenaza de la pena de muerte.
Homofobia en Europa: ¿cuál es la situación en los países europeos?
En los últimos años, Europa ha logrado importantes avances en el fortalecimiento de los derechos de las personas LGTBI. En Irlanda, por ejemplo, a pesar del carácter marcadamente católico del país, un referéndum celebrado en 2015 se saldó a favor del matrimonio igualitario. Sin embargo, en algunos otros Estados miembros de la Unión Europea se han tomado decisiones que han empeorado la situación de las personas LGTBI.
Por ejemplo, el 15 de junio de 2021, el Parlamento húngaro aprobó una ley que restringe la información sobre la homosexualidad y la transexualidad. Se prohibió la representación de comportamientos homosexuales en la publicidad y la información sobre estos temas ya no puede ser accesible para menores de 18 años, lo que también afecta a los libros infantiles y educativos. Además, estos libros ya no pueden venderse a menos de 200 metros de escuelas o iglesias. Esta decisión se justificó en aras de la supuesta protección de los menores. A pesar de que hubo grandes protestas contra la ley en Hungría y de que fue muy criticada por la Unión Europea, el Parlamento votó a favor de su aprobación.
En septiembre de 2021, las autoridades lituanas intentaron utilizar todos los medios legales a su alcance para impedir la celebración del Desfile del Orgullo de Kaunas. Aunque finalmente fracasaron en los tribunales y el desfile se realizó, sufrió ataques de contramanifestantes que lanzaron huevos e insultaron a los participantes. El presidente lituano, Giatanas Nausėda, se opuso públicamente al uso de material educativo relacionado con cuestiones LGTBI.
En octubre de 2021, el Senado italiano rechazó un proyecto de ley contra la homofobia. La ley pretendía penalizar la discriminación y los llamamientos a la violencia contra las personas LGTBI, así como contra las personas con discapacidad. Los casos más graves tendrían penas de prisión. Especialmente los partidos populistas de derechas Lega y Fratelli d'Italia se opusieron a la iniciativa. Los críticos de la ley veían un peligro para la libertad de expresión y argumentaban que la ley habría permitido la "propaganda de la homosexualidad" en las escuelas. Incluso el Vaticano presentó una protesta formal contra el proyecto.
Pero no son solo las decisiones políticas o las leyes lo que dificultan la vida de las personas LGTBI en Europa. También sufren homofobia en su vida cotidiana. En una encuesta sobre la igualdad LGTBI de 2019 por la Agencia Europea de Derechos Fundamentales, mucho más de la mitad de los encuestados (61%) en la UE, Macedonia del Norte y Serbia afirmaron que normalmente o siempre evitan ir de la mano de su pareja del mismo sexo en público; el 40% dijo haber sufrido acoso o intimidación por su orientación sexual.
En Alemania, hasta 1994, el artículo 175 del Código Penal alemán prohibía los actos sexuales entre dos hombres y los tipificaba como delito. En 2002, el Bundestag derogó todas las sentencias que se dictaron en virtud de este apartado hasta 1945 y rehabilitó a las víctimas. No fue hasta el 22 de julio de 2017 cuando se derogaron también todas las sentencias dictadas tras el fin del nacionalsocialismo.
En los últimos años, se han producido algunos avances en Alemania en lo que respecta a los derechos de las personas LGTBI y queer. El 30 de junio de 2017, el Bundestag aprobó una ley que introducía el derecho al matrimonio igualitario. Desde finales de 2018, las personas que no se consideran ni del género masculino ni del femenino tienen la opción de inscribirse como "diversas" en el registro civil (Personenstandsregister).
No obstante, las personas LGTBI en Alemania también se enfrentan con frecuencia a la homofobia. En diciembre de 2021, la Conferencia Alemana de Ministros del Interior, que reúne a los 16 ministros del interior y a los senadores de los estados federales, abordó por primera vez los delitos contra las personas LGTBI. En 2021, se registraron 870 casos de delitos de odio por "orientación sexual", 164 de los cuales fueron delitos violentos. Cabe suponer que el número de casos no denunciados es significativamente mayor. En parte, esto se debe a que las víctimas no siempre acuden a la policía (por ejemplo, por miedo, si aún no han salido del armario) o porque las estadísticas no los contabilizan como delitos de odio, sino como delitos generales.
¿Qué se puede hacer contra la homofobia?
Habida cuenta de que las causas de la homofobia son de distinta índole, debería existir un conjunto de respuestas diversas.
Una forma de contrarrestar la homofobia es mejorar la educación al respecto. La gente a menudo es hostil hacia todo aquello que no conoce, por lo que la educación puede ayudar a romper los prejuicios. Los programas de contacto de bajo umbral podrían ser una posibilidad.
Además, podría ayudar a romper ideas rígidas sobre los roles de género. Por ejemplo, si se dejan de introducir ciertos clichés de género en la educación temprana, para que las niñas no solo vistan de rosa y los niños también puedan jugar con muñecas. Si los identificadores sociales se definen de forma más flexible, es menos probable que los hombres se sientan amenazados en su masculinidad porque una determinada acción se considere especialmente "femenina". Se reduciría así la necesidad de restaurar la propia masculinidad a base de sobrecompensarla o menospreciar a otras personas, como a las personas homosexuales.