En una declaración conjunta, Hungarian Civil Liberties Union y cuatro ONGs más instan al gobierno húngaro y a las autoridades competentes a poner fin de forma definitiva a la retórica que estigmatiza a los refugiados, a tener una postura marcadamente opuesta a cualquier manifestación que pueda suscitar odio y a garantizar que se respeten los derechos humanos y la seguridad de los refugiados que llegan a Hungría. Las organizaciones también exigen justicia y acceso al sistema judicial para las víctimas de delitos de odio.