El 11 de noviembre tuvo lugar la Marcha de la Independencia en Varsovia, el acontecimiento más grande de este tipo en Polonia. Este año, el lema era "Polonia para los polacos, los polacos por Polonia". Al contrario de otros años, no hubo enfrentamientos entre manifestantes y policía. Sin embargo, se lanzaron petardos y se usaron antorchas y bombas de humo; también se coreó: "De los árboles no colgarán hojas sino comunistas" y "Polonia no es islámico ni secular, es católico romano" y se ondearon las banderas islamofóbas y nacionalistas del Movimiento Nacional y el Campamento Nacional Radical.