El Instituto Neerlandés de Derechos Humanos apremia al gobierno de los Países Bajos a fomentar activamente los derechos humanos en toda ocasión. Lo hace por medio de la publicación, el pasado 12 de mayo, de Human Rights in The Netherlands - Summary and Recommendations of the Annual Status Report 2014.

El instituto presenta más de 40 recomendaciones para la mejora de la situación de los derechos humanos en los Países Bajos. El instituto espera que un país que otorga una prioridad alta a los derechos humanos, establezca también normas importantes en esta área en el suelo patrio. Sin embargo, el gobierno limita continuamente los derechos humanos y pospone las acciones necesarias para mejorarlos, sin hacer públicas sus razones.

Con demasiada frecuencia, el gobierno sólo pasa a la acción cuando ha sido reprendido por diferentes entidades por situaciones que son inaceptables desde el punto de vista de los derechos humanos. La seguridad de los ciudadanos en la zona del terremoto de Groningen, la acogida de las personas sin estatus válido de residencia y la captación y retención a gran escala de datos de comunicación, son tres ejemplos al caso.

‘‘Los derechos humanos son normas mínimas que un país debe cumplir para que todas las personas vivan con dignidad en su territorio. Por supuesto que muchas cosas están bien organizadas en los Países Bajos. Pero se puede y realmente se debe hacer mejor. Los derechos humanos son aplicables a todo ser humano, también cuando es duro defenderlos en solitario’’, afirma el presidente del instituto, Laurien Koster.

Garantizar la protección jurídica de calidad

Varias leyes y propuestas legislativas de los Países Bajos otorgan a los ministros y a los alcaldes la posibilidad de tomar medidas sin necesidad de un informe jurídico previo que determine si las medidas están justificadas. Por ejemplo, los registros de locales, la renuncia a la ciudadanía o las prohibiciones de movilidad. Los que sufren las consecuencias tienen la opción de ir a los tribunales cuando ya han tenido lugar estas acciones, pero el daño ya está hecho.

De esta manera, el gobierno elude una protección jurídica más fuerte por la cual un juez informaría de si la imposición de ciertas medidas está justificada o no. Una vez que se ha llevado a cabo la violación de, pongamos, la privacidad de alguien, es irreversible. Por ello es tan importante que un juez considere imparcialmente todos los intereses, para garantizar que los intereses del individuo no se dejan de lado con facilidad. El juez puede también decidir si está justificado o no restringir un derecho público en un caso específico.

El Caribe neerlandés

Los Países Bajos comprende los Países Bajos europeos y los Países Bajos caribeños: Curazao, San Martín, Bonaire, San Eustaquio y Saba. En estas islas, gran parte de la población lucha por la subsistencia diaria. El coste de la vida es tan alto que incluso los que tienen trabajo viven en la pobreza. Además, el gobierno pospone la implementación de la Convención de Estambul en el Caribe neerlandés. La convención trata de la eliminación de toda forma de violencia contra las mujeres y de la violencia doméstica. El motivo para posponerla es la gravedad y extensión del problema en el Caribe neerlandés.

Personas con discapacidad

Las personas con discapacidad siguen todavía sin poder participar en todas las áreas de la vida social. La Convención de la ONU sobre los derechos de las personas con discapacidad debería proporcionar un nuevo impulso para cambiar esta situación. Los Países Bajos estuvieron a punto de aprobar esta convención en 2015, pero el Consejo de Ministros ha devuelto el plan de implementación de la misma a la comisión técnica. Ahora, no está claro que la aprobación en 2015 sea todavía factible.

Mientras tanto, las personas con discapacidad siguen sin poder vivir, viajar o entrar en edificios públicos por sí solas. Por consiguiente, el Instituto Neerlandés de Derechos Humanos recomienda que el gobierno tome medidas con rapidez, consultando a los grupos interesados, para hacerlo posible. Esta obligación existe ya.

El conocimiento es fundamental

El conocimiento de los derechos humanos es fundamental en las diferentes áreas sociales. La descentralización tiene consecuencias directas para las personas y sus derechos, y sin embargo, los ayuntamientos carecen del conocimiento adecuado. Además, no todas las escuelas instruyen a sus alumnos sobre sexualidad y diversidad sexual, a pesar de que es obligatorio. Los alumnos tienen un desconocimiento total de los derechos de la infancia y de los derechos humanos en general.

Los Países Bajos no cumplen la obligación de garantizar que los alumnos aprendan y entiendan los derechos humanos. Depende del gobierno dar buen ejemplo y proporcionar sesiones de formación a los profesionales, comenzando por los funcionarios públicos, para que conozcan los derechos humanos y apliquen ese conocimiento en su trabajo.