La prensa belga ha revelado un posible comportamiento inapropiado durante la autopsia de los dos sospechosos de yihadismo muertos en la redada antiterrorista de la policía en Verviers el 15 de enero. El caso plantea una cuestión importante: la necesidad de una investigación independiente que determine las circunstancias exactas de esta redada. La operación recibió la aprobación generalizada por la amenaza de terrorismo, pero esta aprobación no exime a las autoridades de comprobar si los procedimientos cumplen las exigencias legales y la jurisprudencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.