El reglamento, que, si se aprueba, se aplicaría en toda la UE, incentiva a las plataformas de internet a utilizar herramientas automatizadas, como filtros automatizados, para eliminar el contenido que considere de carácter "terrorista". Sin embargo, es imposible que un sistema de moderación automática diferencie entre lo que es parodia, sátira, material educativo y contenido terrorista verdadero. Por ello, es muy probable que el contenido informativo, periodístico o las pruebas de crímenes de guerra o de maltrato a las minorías que se suben a la red, se eliminen sistemáticamente, minando así nuestra capacidad de informarnos o de expresarnos libremente.
Lo más preocupante es que cualquier país de la UE puede emitir una orden de retirada de contenido alojado en cualquier lugar de la UE en el plazo de una hora, sin ningún tipo de control o supervisión judicial. Es decir, que regímenes autoritarios, como los de Polonia y Hungría, podrían silenciar a sus críticos en el extranjero emitiendo órdenes de eliminación de contenido más allá de sus fronteras y extender de facto su jurisdicción más allá de su territorio. Dado que esto se debe realizar en el plazo de una hora, las plataformas de internet no tendrán más remedio que cumplir estas órdenes para evitar multas o problemas legales. Asimismo, el reglamento tampoco resuelve los desacuerdos entre los países de la UE sobre qué constituye terrorismo, ironía, arte o información periodística.
Durante la sesión plenaria del 26 al
29 de abril en Estrasburgo, los eurodiputados tendrán que votar a
favor o en contra de un Reglamento para prevenir la difusión de
contenido terrorista en línea. Nuestra coalición insta al
Parlamento Europeo a que rechace la propuesta, ya que plantea graves
amenazas a la libertad de expresión y de opinión, a la libertad de
acceso a la información, al derecho a la privacidad y al Estado de derecho. Además, sienta un precedente peligroso para cualquier
legislación futura de la UE que regule el ecosistema digital, pues
distorsiona el marco de aplicación de la ley con el pretexto de
reforzar el Mercado Único Digital. El Reglamento propuesto, tal como
está ahora, no tiene cabida en la legislación de la UE.
Puedes leer más abajo la carta enviada a los eurodiputados.
Descarga la versión de la carta en: neerlandés. inglés. francés. alemán. italiano. polaco. rumano. español. sueco.
Estimado/a miembro del Parlamento Europeo,
Nos dirigimos a usted para expresar nuestra preocupación acerca de la propuesta de Reglamento de la Unión Europea para la prevención de la difusión de contenido terrorista en línea. Instamos a los miembros del Parlamento Europeo a que voten en contra de la aprobación de la propuesta.
Desde 2018, las organizaciones de derechos humanos, asociaciones de periodistas e investigadores abajo firmantes, hemos estado advirtiendo de las graves amenazas a los derechos y libertades fundamentales que contiene esta propuesta legislativa, especialmente para la libertad de expresión y opinión, el derecho de acceso a la información, el derecho a la privacidad y el Estado de derecho.
Gracias al trabajo del equipo negociador del Parlamento Europeo, a un amplio debate y a la participación de la sociedad civil, algunas de las cuestiones problemáticas de la propuesta se abordaron durante los triálogos entre el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea.
Sin embargo, a pesar del resultado de la última negociación del triálogo, el texto final de la propuesta de Reglamento contiene aún medidas peligrosas que, en última instancia, debilitarán la protección de los derechos fundamentales en la UE. Asimismo, puede sentar un peligroso precedente para la regulación de los contenidos en línea en todo el mundo.
La propuesta de Reglamento se votará para su aprobación definitiva en el pleno del Parlamento Europeo en abril de 2021. Instamos a los miembros del Parlamento Europeo a que voten en contra de la aprobación de la propuesta por las siguientes razones:
- La propuesta sigue incentivando a las plataformas de internet a que utilicen herramientas de moderación automática de contenidos, como los filtros automatizados
El breve plazo que impone la propuesta a los proveedores para eliminar el contenido considerado terrorista incentiva fuertemente a las plataformas a emplear herramientas de moderación automática de contenidos, como los filtros automatizados, con el fin de eliminar el contenido terrorista. Las prácticas actuales de moderación de contenido se caracterizan por la profunda falta de transparencia y de precisión de la toma de decisiones automatizada. Debido a que es imposible que las herramientas automatizadas diferencien sistemáticamente la sátira, el activismo o los discursos en contra del terrorismo, de los contenidos que se consideran terrorismo en sí mismos, el aumento de la automatización acabará provocando la eliminación de contenido legal, como la información periodística o denuncias sobre trato discriminatorio hacia las minorías y grupos infrarrepresentados. Las plataformas ya eliminan una gran cantidad de contenido que documenta la violencia en zonas de guerra, subido por los supervivientes, civiles o periodistas, tal y como han revelado proyectos como Syrian Archives y Yemeni Archives, lo que puede obstaculizar los esfuerzos de investigación sobre responsabilidades. El Reglamento propuesto, que carece de salvaguardias para evitar estas prácticas cuando se utilizan herramientas automatizadas, no hará sino reforzar esta tendencia. Los filtros de contenido automatizados pueden tener además un efecto adverso en internet, especialmente en lo que respecta a su arquitectura abierta y a sus componentes interoperables.
- Existe un grave carencia de supervisión judicial independiente
La propuesta pide a los Estados miembros que designen, a su discreción, “autoridades nacionales competentes” que estén facultadas para aplicar las medidas del Reglamento, especialmente la emisión de órdenes de retirada de contenido. A pesar de que la propuesta establece que estas autoridades deben ser objetivas, no discriminatorias y respetar los derechos fundamentales, creemos que solo los tribunales o las autoridades administrativas independientes sujetas a control judicial deberían tener competencias para emitir órdenes de retirada de contenido. La falta de supervisión judicial supone un grave riesgo para la libertad de expresión, reunión, asociación, religión y el derecho de acceso a la información. Asimismo, socava la Carta de Derechos Fundamentales, que protege la libertad de recibir y difundir información y establece que la expresión lícita está protegida y únicamente puede limitarse con posterioridad por un tribunal y tras una solicitud legítima.
- Los Estados miembros emitirán órdenes transfronterizas de retirada de contenido sin ningún control
De acuerdo con el resultado del triálogo, cualquier autoridad competente podrá ordenar la eliminación de contenido en línea, alojado en cualquier lugar de la UE en el plazo de una hora. Esto significa que un Estado miembro puede ampliar su ejecución jurisdiccional más allá de su territorio sin necesidad de un control judicial previo ni de tener en cuenta los derechos de las personas en las jurisdicciones afectadas. A la luz de las graves amenazas al Estado de derecho en algunos Estados de la UE, la confianza mutua que sustenta la cooperación judicial europea podría verse gravemente socavada. Además, el procedimiento de notificación mínima y verificación por parte del Estado afectado previsto en el texto actual no contiene suficientes salvaguardias para prevenir la extralimitación estatal y el abuso de poder, y no resolverá los desacuerdos entre los Estados miembros sobre qué constituye terrorismo, ironía, arte o ejercicio periodístico.
Instamos al Parlamento Europeo a que rechace esta propuesta, que supone una grave amenaza para la libertad de expresión y de opinión, el derecho de acceso a la información, el derecho a la privacidad y el Estado de derecho. Además, sienta un peligroso precedente para cualquier legislación futura de la UE que regule el ecosistema digital, pues distorsiona el marco de aplicación de la ley con el pretexto de reforzar el Mercado Único Digital. Por ello, la propuesta de Reglamento para prevenir la difusión de contenido terrorista en línea, tal como está ahora, no tiene cabida en la legislación de la UE.
Access
Now, Internacional
Amnesty International
Antigone, Italia
ARTICLE 19, Internacional
Asociația pentru Tehnologie și Internet (ApTI), Rumanía
Association of European Journalists (AEJ), Bélgica
Bits of Freedom, Países Bajos
Bulgarian Helsinki Committee, Bulgaria
Centre for Democracy & Technology (CDT), Internacional
Chaos Computer Club (CCC), Alemania
Civil Liberties Union for Europe (Liberties), Internacional
Comité de Vigilance en matière de Lutte contre le Terrorisme (Comité T), Bélgica
Committee to Protect Journalists (CPJ), Internacional
Communia, Internacional
Digitalcourage, Alemania
Digitale Gesellschaft, Alemania
Digital Rights Ireland, Irlanda
Državljan D, Eslovenia
Electronic Frontier Finland (Effi), Finlandia
Electronic Frontier Foundation (EFF), Estados Unidos
Elektroniks Forpost Norge (EFN), Noruega
Entropia e.V., Alemania
epicenter.works, Austria
European Digital Rights (EDRi), Internacional
European Federation of Journalists (EFJ), Internacional
Fitug e.V., Alemania
Föreningen för digitala fri- och rättigheter (DFRI), Suecia
Freemuse, Internacional
Global Forum for Media Development (GFMD), Internacional
Global Voices, Internacional
Helsinki Foundation for Human Rights, Polonia
Hermes Center, Italia
Homo Digitalis, Grecia
Human Rights Monitoring Institute, Lituania
Human Rights Watch, Internacional
International Commission of Jurists, Internacional
Internationale Liga für Menschenrechte, Alemania
International Federation for Human Rights (FIDH), Internacional
Internet Governance Project, School of Public Policy at the Georgia Institute of Technology
Internet Society, Internacional
IT Political Association of Denmark (IT-Pol), Dinamarca
Irish Council for Civil Liberties, Irlanda
La Quadrature Du Net (LQDN), Francia
Latvian Human Rights Committee, Letonia
Liga voor de Rechten van de Mens, Países Bajos
Liga voor Mensenrechten, Bélgica
Ligue des Droits de l’Homme, Francia
Ligue des Droit Humains, Bélgica
Mnemonic, Internacional
Open Technology Institute, Estados Unidos
Panoptykon Foundation, Polonia
Ranking Digital Rights, Estados Unidos
Reporters Without Borders (RSF), Internacional
Rights International Spain, España
Statewatch, Reino Unido
Vrijschrift.org, Países Bajos
Wikimedia Deutschland, Alemania
Wikimedia France, Francia
WITNESS, Internacional
Xnet, España
7amleh - The Arab Center for the Advancement of Social Media, Palestina