El Tribunal europeo de derechos humanos ha mantenido una ley francesa de 2010 que prohíbe el uso del velo integral en público. La ley que prohíbe el uso en espacios públicos de cualquier ropa destinada a cubrir la cara entera, impone una multa de 150 euros. En su fallo, el Tribunal dijo que la prohibición "no se basaba expresamente en la connotación religiosa de la ropa en cuestión, pero únicamente en el hecho de que oculta el rostro."