Un hombre de 34 años de Eindhoven ha sido condenado a tres años de cárcel por trata de personas. Cometió abusos graves a tres mujeres en 2009 y 2010. A una de las mujeres, neerlandesa, la obligó a que trabajara en la industria del sexo para él. Las otras dos víctimas son rumanas, las trajo a los Países Bajos para que trabajaran como trabajadoras sexuales. Según el juez, las formas de trata de las que es culpable son tan graves, que una condena incondiconal sería adecuada.